La superficie cubierta con soja en la campaña 2016/2017 será menor a la sembrada en el ciclo precedente, así lo afirmaron ayer la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) y la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) en sus respectivo informes de pre campaña y de estimaciones agrícolas.

soja

Esa no fue la única coincidencia: ambas entidades estimaron el área destinada a la oleaginosa en 19,60 millones de hectáreas. La diferencia es que para la primera la cifra implica una caída del 2,5% frente a los 19,70 millones anteriores, en tanto que para la segunda marca un retroceso del 3% en comparación con los 20,20 millones de hectáreas de la temporada agrícola 2015/2016.

«Las modificaciones sobre el marco regulatorio registradas desde finales de 2015 han generado un escenario alentador para cereales como el trigo y el maíz, promoviendo un aumento en sus respectivas áreas cultivadas. Simultáneamente, la importante expansión de la superficie sembrada con girasol en sectores del norte del país también reduce la superficie disponible para el resto de los cultivos de verano», explicó la BCBA y añadió que la actual previsión de siembra 2016/2017 se ubicaría «por debajo del promedio de las cinco campañas precedentes, de 19,70 millones de hectáreas».

En su trabajo, la BCR destaca que la caída del 3% del área destinada a la soja se da pese al importante aumento de la siembra de maíz para todos los usos (comercial y forrajero) en la campaña 2017/2016, que pasa de 4,85 a 5,70 millones de hectáreas. Según la entidad ese retroceso de la oleaginosa fue amortiguado por la «reincorporación en el sistema agrícola de unas 300.000 hectáreas, en un contexto positivo para la actividad, que vuelve a tomar un rumbo expansionista y que aún tiene espacio para crecer».

Para la BCBA, las mayores reducciones de superficie se darán en el centro del área agrícola nacional. Y en el mismo sentido de lo expresado por la BCR detalló que sectores del NOA, NEA, San Luis, del norte de La Pampa y del oeste y del centro de Buenos Aires «podría registrar una recuperación del área agrícola en lotes previamente abandonados, que serían destinados a la soja y que así amortiguarían la reducción interanual».

La Nación/Bolsa Cereales