La actual campaña 2019/20 de maíz ha comenzado su ciclo comercial con una oferta total que se estima en 54,6 Mt, siendo un récord histórico hasta el momento y representando el doble de lo que se disponía hace una década atrás, según informa la Bolsa de Comercio de Rosario. A su vez, teniendo en consideración que recién en el actual mes de septiembre la cosecha estadounidense entrará al mercado, Argentina y Brasil han sido los protagonistas en materia de exportaciones del cereal.

Los envíos al exterior del maíz local totalizan 25,4 Mt en lo que va de la campaña comercial 2019/20 comenzada en marzo. Ello implica un 13% más que la campaña previa y casi un 90% por encima de lo obtenido en el ciclo 2017/18, cuando las severas condiciones climáticas afectaron gravemente a los rendimientos obtenidos por el cultivo.

Es importante recalcar que las 4,63 Mt embarcadas en agosto de 2020 son estimaciones preliminares en base a los datos provistos por la agencia NABSA. De confirmarse dicho tonelaje despachado, estaríamos frente al mes con mayores embarques de maíz de la historia Argentina. En este sentido, frente a la inminente presencia de Estados Unidos en el mercado, pareciera que se han aunado todos los esfuerzos para despachar la mayor cantidad de cereal posible. Dicha situación bajo un contexto de precios FOB para Argentina que se pudieron mantener por encima de lo cotizado en el Golfo de México para el mes de agosto, aunque por detrás de la locación Paranaguá en Brasil.

En el mercado local, los indicadores comerciales indican que ya se ha vendido el 70% del cereal producido (35,8 Mt), ubicándose en términos relativos casi un 10% por encima de la campaña previa y del promedio de los últimos cinco años. En materia de existencias físicas de grano, según el último dato publicado esta semana por MAGyP, las mismas superan cómodamente lo registrado en las últimas cinco campañas comerciales con 14,5 Mt. No obstante, si se evalúa dicho indicador como proporción de la oferta disponible para cada campaña, los stocks se han mantenido altos desde el mes de marzo pero por detrás del ciclo 2017/18 al primero de agosto de 2020. A su vez, de acuerdo a la tendencia de los ciclos anteriores es de esperarse que siga declinando dicha proporción en los meses subsiguientes.

Respecto al mercado de soja, su comercialización se ha ralentizado levemente si se compara con el promedio de los últimos cinco años. Se llevan vendidas unas 30,3 Mt según el último dato hasta el 26 de agosto, lo cual es el 60% de la producción total estimada. Mientras que para el promedio de los últimos cinco años dicho porcentaje se encuentra en 65% con 34,3 Mt, por lo que en términos absolutos la diferencia alcanza las 4 Mt debido a la menor cosecha obtenida en el presente año.

En cuanto a las cotizaciones no han sido las más favorables desde el comienzo de la campaña actual, con precios en el mercado disponible arribando a mínimos desde al menos el año 2012 hacia finales de abril. Afortunadamente, dichos valores lograron un vigorozo rebote desde principios de mayo y el precio de la oleaginosa al momento actual es un máximo desde el año 2016 con US$ 257/t, según la Cámara Arbitral de Cereales de Rosario (CACR). Por lo tanto, con dichos valores actuales podría esperarse una mayor concreción de negocios, que actualmente ronda las 300 mil toneladas semanales para la soja con destino al Gran Rosario, según información oficial de SIO-Granos.

Sobre los embarques del complejo soja en lo que va de la campaña 2019/20, destacan los importantes despachos de grano sin industrializar. Tal como se ha comentado en Informativos Semanales previos, ello encuentra sentido en que los márgenes se han encontrado tendientes a perjudicar a la industrialización conllevando a mayores exportaciones del grano sin procesar. Es importante destacar que según las últimas estimaciones del USDA, para campaña próxima 2020/21 se aguarda un ajuste importante en las exportaciones de poroto de soja tanto para Argentina como Brasil. La soja estadounidense tomará protagonismo en los mercados externos, debido a los compromisos asumidos por parte de China luego del acuerdo comercial firmado a comienzos de año. Respecto a las exportaciones de aceite de soja el USDA espera records históricos, con las harinas y pellets mejorando su desempeño en términos de volúmenes.

Hasta el momento se han despachado 7,2 Mt de poroto de soja, representando un 39% más que el año previo. Por el lado del aceite de soja, los exportadores han podido colocar un 10% más que en el ciclo comercial anterior con 2,8 Mt. En este punto es importante recalcar que la menor producción de biodiesel ha ajustado a la baja la demanda interna del aceite para el sector energético, repercutiendo en un mayor saldo para exportar. Los embarques de harinas y pellets de soja, en tanto, han presentado hasta el momento un desempeño más magro con 500 mil tn menos que la campaña previa y alcanzando las 13 Mt.

En Chicago destaca la rentabilidad que ha adquirido la soja frente al maíz

En las últimas semanas, el Mercado de Chicago ha sido noticia por el fuerte impulso que ha adquirido el mercado de soja con repercusiones en el resto de los mercados, entre ellos, la plaza local. Desde comienzos de agosto, la oleaginosa estadounidense ha repuntado su cotización US$ 34/t hasta los US$ 353/t la jornada de ayer, lo cual es un máximo desde junio de 2018.

En este sentido, los ratios de precios más altos indicarían que la soja es relativamente más rentable que el maíz a primera vista para el mercado de Estados Unidos.

La evolución reciente del indicador ha subido fuertemente desde comienzos de julio alcanzando los 2,67 a principios de agosto y representando un máximo desde diciembre de 2017. Según un informe publicado por el Servicio de Investigaciones Económicas del USDA, esta proporción, ha promediado los 2,51 durante los últimos 20 años.

De esta forma, ante el gran desempeño que se prevé que tenga el maíz en Estados Unidos y sumado a las muy buenas cosechas en otros países productores claves, su valor se ha erosionado en relación a la oleaginosa. De sostenerse dicha relación de precios, el productor estadounidense podría privilegiar una mayor superficie con destino a dicho cultivo de cara al futuro.